A través de Ediciones SM nos ha llegado nuestra última lectura. Se trata de Billy Elliot, de Melvin Burguess. Una novela juvenil destinada a adolescentes a partir de 10 años, y que, ya os adelanto, ¡nos ha fascinado!
Nos ha gustado no solo por lo bien argumentada, estructurada, y por su lectura ágil, sino por el retrato social, y especialmente, por el mensaje que encierra entre sus páginas: «Lucha por tus sueños y olvida el qué dirán. Solo así conseguirás ser feliz». No sé si a vosotros, pero a mí personalmente, me hace pensar en Sir Ken Robinson y sus teorias sobre la creatividad y la importancia de que cada persona encuentre aquello que realmente le apasiona: “Una forma de abrirnos a nuevas oportunidades es hacer esfuerzos deliberados por mirar de un modo distinto las situaciones ordinarias. Al hacer esto puedes ver que el mundo está lleno de innumerables posibilidades y aprovechar alguna de ellas si te parece que merece la pena.” (El emlemento. Descubrir tu pasión lo cambia todo).
Si a los factores mencionados les unimos el hecho de que, en la historia, nuestro protagonista posee un talento que, en un pueblecito minero del norte del Reino Unido, conlleva muchos prejuicios de género, tenemos en nuestras manos una novela que nos resulta apasionaste de leer a la par que educativa.
Lo más habitual es que sean los libros los que pasen a las pantallas. En el caso de Billy Elliot se trata del proceso contrario: Melvin Burguess escribió Billy Elliot basándose en el guión de Lee Hallde para la película del mismo título dirigida en el 2000 por Stephen Daldry.
Ficha técnica de Billy Elliot
Título: Billy Elliot
Autor: Melvin Burguess
Ilustraciones: María Simavilla
Editado: Literatura SM
Colección: Barco de vapor
Nº de páginas: 192
Edad recomendada: +10
Género: realismo
Temática: social, diferencias de género, adolescencia, prejuicios culturales.
Sinopsis de Billy Elliot
Billy Elliot es un niño de 12 años, cuya madre ha muerto. El protagonista convive con su padre, su hermano mayor y la abuela materna, con demencia senil. Habitan en un pequeño pueblo minero que no pasa por su mejor momento. El padre y el hermano de Billy llevan meses en huelga y la situación familiar es complicada.
El padre de Billy lo apunta a clases de boxeo. Allí, Billy descubre que lo que realmente le gusta y le apasiona es el ballet.
Una historia que nos habla de talento, superación y lucha contra los prejuicios de género.
Opinión personal sobre Billy Elliot
Billy Elliot es una de esas novelas que cuando pasas su última página te sumergen en esa especie de sensación de nostalgia y ganas de más que solo percibes tras una buena lectura. El estilo literario está bien logrado y construido, especialmente si tenemos en cuenta que en la historia cada capítulo posee un narrador diferente. Nos ponemos en la piel de la visión ajena a los prejuicios y todavía inocente de Billy a sus 12 años o en la de, por ejemplo, su padre ya curtido en la vida, a base de años y luchas.
Por otra parte, y esto va genial para los más jóvenes, Billy Elliot posee una gran plasticidad en el sentido de que las escenas están cuidadosamente descritas.
Enseguida empatizamos con muchos de los personajes, especialmente con el protagonista, ya que a medida que vamos pasando páginas vamos adentrándonos en sus diferentes visiones sobre unos mismos acontecimientos. La historia se va viviendo desde diversos puntos, que nos llevan a conocer las distintas formas de pensar de aquellos que están más o menos implicados en el desarrollo de la trama.
En este sentido valoro muy positivamente el ingenio del autor, Melvin Burguess, para sumergirnos en los pensamientos más íntimos de los personajes.
La historia se desarrolla en un pueblo pequeño, minero, conservador. A pesar de que la diferencia en el tiempo no es abismal (finales del s. XX), sí que, especialmente a los jóvenes lectores, les puede parecer una forma de vivir muy distinta a la del siglo XXI.
Sin embargo, por desgracia, a día de hoy todavía siguen existiendo prejuicios de género, y por ello la lectura de esta novela es ideal para educar a los niños en la igualdad y en la necesidad de perseguir los sueños, independientemente del «qué dirán», y que ser diferente es algo difícil en determinados lugares, sin embargo, no vale la pena rendirse.
En definitiva, es una lectura muy recomendable, en este sentido debo añadir que la colección Barco de vapor nunca defrauda. La historia es el reflejo de una sociedad con sus miedos, relaciones, preocupaciones por el porvenir y lucha por un futuro mejor. Seguro que a los adolescentes les gustará seguir a Billy Elliot en sus aventuras en pos de sus sueños, con un imparable afán de superación y saltando por encima de las barreras de las ideas preconcebidas y el conservadurismo rancio que a día de hoy aun tiene su peso.
Totalmente de acuerdo con tu reseña. Cuando me enteré de que era una adaptación del guión pensé que la calidad sería la justa, pero todo lo contrario. Justo me aporta lo único que se echa de menos en el guión de Billy Elliot, meterme en sus cabezas 😀