El primer viernes de septiembre. Con él la vuelta de las vacaciones. El momento de retomar el blog y mi participación en la música de los Viernes Dando la Nota. En nada, la vuelta al cole y ¡fin de la buena vida!, como mínimo para los escolares, que según mi opinión están demasiado sobrecargados de deberes y actividades. Horarios inhumanos que a veces cuestan de digerir.
Hasta la semana que viene no pienso ultimar los detalles para la vuelta, básicamente porque lo tengo casi todo preparado. Y quiero aprovechar hasta el último minuto. Todavía tenemos algo de tiempo para la desconexión y para mantenernos ese estado como de stand-by sin más obligaciones que las que nos imponemos nosotros mismos.
Y por eso, porque me niego a reconocer que el verano que esperé en candeletas, se nos escape así de rápido, os traigo un clásico muy veraniego. Porque aún, a pesar de las lluvias de esta semana, espero todavía poder disfrutar de algunos días de playa y momentos en familia.
Ya habrá tiempo para atosigar a los niños instándoles a que terminen los dichosos deberes. ¡No os podéis imaginar como odio tener que hacer de Srta. Rottenmeier!, y más para algo con lo que no estoy nada de acuerdo.
Creo que el tema de este #VDLN se me ha introducido en la mente este verano de la mano de una conocida marca de yogures… Y al respecto debo decir que si hay una cosa que siempre me ha molestado es que se utilicen temas buenos para los anuncios de televisión.
Personalmente el hecho de asociar la música a un determinado producto hace que esta pierda parte de su esencia. ¡Ay! El poder del marketing… Pero en fin, es mi opinión, supongo que hay a quien no le importa.
Y la canción que os traigo es un mambo. Concretamente el Mambo número 5, del que circulan varias versiones. La versión original data del año 1949 del cubano Dámaso Peréz. Sin embargo, la más famosa es la de Lou Bega, 1999, en su álbum A little Bit of Mambo. Aparte del video original, que incluye imágenes de reportajes y películas antiguas también hay un video de Disney que seguro que a los peques les encanta.
A mí este mambo me transmite optimismo y no me negaréis que os entran ganas de bailar. De hecho, al escucharlo como música de fondo mientras escribo se me ocurre proponerles a mis chic@s que saquemos el juego del Just Dance de la Wii U, que también tiene su versión. Pues lo dicho, en cuanto acabe de escribir nos ponemos al baile y de paso quemamos los excesos veraniegos. ¿Con qué versión os quedáis vosotros?
Que buen Mambo! Justo ayer estaba practicando en mis clases de baile en el gym unos pasitos de mambo 🙂 Buen fin de semana.
Pues, a seguir practicando 😉 Buena semana!!
Si que es verdad que trae buen rollo, siempre da alegría al cuerpo volver a escuchar la versión de Lou Bega, y es que ya la original es genial. En su época termine hartita de escucharlo, pero ahora ya desintoxicada, entran ganas de mover el culete! Buena semana!
Eso pasa, te pones una canción mil veces y al final la aborreces…Pero al cabo del tiempo..!! Buena samana
Mejor así que la vuelta sea con buen rollo. El baile os lo dejo a vosotras. Creo que en su día me afilié al punk porque allí con saltar y empujar valía. Buena semana y feliz regreso.
Sí mejor tomarse las cosas bien y con ganas!! Feliz semana para ti también!!
He de reconocer que tuve una época de bailar mucho esta música.. A Lou Bega XD LAs vueltas que da la vida che! Mola el ritmito que tiene.. Te guste o no incita a mover el esqueleto.. y yo no soy de bailar.. jjajaja Feliz vuelta al cola y Feliz semana guapa!
Ja,ja…Sí a mover el esqueleto!!! Ay la vuelta, hoy forrando libros y el peque todo ilusionado con lo que va a trabajar.Besos guapa!!
Pues sí, que decirte del Mambo que lo he bailado desde niña ,y para estas jornadas de forrar y etiquetar montañas de libros viene muy bien.
Sí por aquello de al mal tiempo buena cara!!! menos mal que ya acabé de forrar porqué todos se escaquearon!!!