Hace unos días, aprovechando el Día Internacional de los Museos, nos acercamos hasta Mataró para disfrutar de una visita teatralizada en la villa romana Torre Llauder. La villa se ubica a poco más de 1 km. del centro de Mataró.
El nombre del yacimiento se debe a que en sus inmediaciones se erigía una casona denominada Torre del Llauder. Una casa de payés fortificada que se construyó en torno a una torre de defensa. La casa fue derribada a raíz de un plan urbanístico sobre los años 70 del pasado siglo.
La villa romana Torre Llauder
Desde hacía años se daban indicios de la existencia del yacimiento, pero fue en 1961 cuando un arqueólogo de Mataró, Marià Ribas, descubrió parte de la villa romana y llevó a cabo las excavaciones que permitieron sacar a la luz los restos de la parte residencial de la villa romana Torre Llauder.
Los restos encontrados denotan que el yacimiento pasó por diversas fases. La primera conocida nos retrotrae a la época del emperador Augusto. Por aquel entonces se ubicaba allí un establecimiento que se dedicaba la la producción de vino para exportar.
Más adelante, en el I d. C., sobre el establecimiento se levantó una villa romana que en el s. III vivirá la época de esplendor. Es de esa época de la que datan los mosaicos que podemos ver. Ya en época tardorromana las estancias señorales son reaprovechadas para otros usos, como el de almacenaje o zona de trabajo.
Visita teatralizada a la villa romana Torre Llauder
Durante la visita teatralizada, de una forma cómica, amena y distendida, se nos presenta el personaje de Caius (Caius Marius Aemilianus hijo de Lucius, de la tribu Aniensis, barcelonés inmune, un patricio de Barcino) junto a su vilicus. Nos muestran el recinto, en el que podemos disfrutar de los restos de las estancias señoriales de la villa romana de la Torre Llauder. Para empezar, observamos las termas, de las que se conservan el frigidarium, caldarium y tepidarium. Son pequeñitas. Seguimos por las letrinas, el tablinium y el triclinium, donde podemos apreciar algunos restos de mosaicos.
También se puede ver claramente el atrio, con su impluvium sustentado por los restos de 4 columnas. Asimismo se conservan parte de las columnas del peristilo y la zona donde en su momento se ubicaba el jardín.
La visita teatralizada duró aproximadamente 1 hora. A lo largo del año se puede disfrutar de una visita guiada a la villa romana Torre Llauder. En horario de invierno, los sábados a las 12 del mediodía, y en verano, los sábados a las 7 de la tarde.
La parte que podemos visitar nos muestra las dependencias nobles, que son las que se han conservado, y no parece que fuera excesivamente grande. Lo mejor, especialmente si vais con niños, es que es muy visual. Es posible apreciar cada una de las estancias, perfectamente delimitadas. Por otra parte, vale la pena recrearse en parte de los mosaicos que han llegado a nuestra época.
Después de la visita a la villa romana Torre Llauder tenéis la posibilidad de continuar indagando cómo era la vida en la época romana en el Museo de Mataró, donde podréis encontrar cornisas, relieves, y algunas de las esculturas que se han extraído del yacimiento arqueológico.
Me encanta. Que planazo. Teatro, arqueología, historia… todo en uno!
Que interesante, no sabía de este yacimiento, alguna escapadita habrá que hacer jeje, estas cosas creo que tienen como una magia especial que te envuelve 😀
Besote!!!