Los padres nos preocupamos de proporcionar las bases para un correcto desarrollo de nuestros hijos, con el objetivo de que crezcan sanos y saludables. Para ello, cuidamos su alimentación, la actividad física, la educación,… Un elemento que resulta fundamental para un sano crecimiento es la gestión de las emociones.
Es importante que desde los primeros años los niños aprendan a gestionar las emociones. Aunque cada etapa tiene su nivel y se dan diferentes formas de expresarlas, ya desde la primera infancia las emociones están bien presentes: la ira, el miedo, la alegría, la tristeza, celos, frustración,…
Es importante que los pequeños aprendan a reconocer las emociones básicas, ya que eso les aportará buenas pautas para aprender gestionarlas. A medida que pasa el tiempo, las emociones se vuelven más complejas y se van estabilizando, los niños van adquiriendo control sobre las mismas… y en ese camino es donde padres y educadores les debemos servir de guía con la finalidad de que sepan administrarlas de la mejor manera posible.
Algunas herramientas para trabajar las emociones son:
El diálogo y la gestión emocional
El diálogo les permitirá desarrollar su capacidad de comunicación. Por otra parte, si se sienten escuchados, trabajarán la aptitud de escuchar a los demás.
En este sentido, es importante que ante una emoción de nuestros hijos no la neguemos ni la evitemos, sino que les conduzcamos a conocerla, afrontarla y gestionarla.
Uno los elementos relevantes en la educación emocional es favorecer el desarrollo de la empatía. Ya que, en nuestra sociedad no es solo importante conocer cómo nos sentimos nosotros, sino también saber interpretar al resto. Hay que enseñarles a salir de sí mismos y ponerse en lugar del otro ¿Cómo se siente X ante determinada situación? ¿Como te sentirías si tu fueras X?
A través de un diálogo fluido, dejando a los niños expresarse libremente, sin enjuiciar ni corregir, con las preguntas adecuadas, y en un ambiente distendido, podremos avanzar en el tema y especialmente en aquellas situaciones en que el niño por diversos motivos pueda estar más susceptible y sus emociones afloren con mayor facilidad: la vuelta al cole, malos entendidos con sus amigos, etapas en las que aparezcan con mayor fuerza los celos entre hermanos, negatividad,…
Juegos para trabajar las emociones
A nivel de juegos, son muy útiles las cajas de emociones en las que se depositan papelitos con emociones escritas en ellos, que se recuperan cuando se necesitan. Por ejemplo, una caja de dar gracias por todas las cosas buenas recibidas. La abriremos en aquellos días algo más grises emocionalmente para que los niños aprendan que, aunque a veces las cosas no salen como esperábamos, siempre hay muchas cosas buenas que tenemos que agradecer a la vida.
O el famoso bote de la calma para gestionar los enfados.
Otra buena opción es jugar al teatro. Preparamos una fichas con caras que expresen diferentes emociones: alegría, tristeza, enfado, sorpresa, miedo,… Por turnos, cada niño coge una ficha y tiene que interpretar la emoción, el resto tienen que averiguar qué emoción es.
También se pueden realizar calendarios semanales en los que al final del día el niño dibuje o pegue un gomet con aquella emoción que ha adquirido mayor protagonismo a lo largo de la jornada… El calendario a veces puede ser un punto de partida hacia una charla con ellos.
Esto no son más que algunos ejemplos, podéis encontrar infinitos recursos, tanto en la Web como en libros especializados.
Los cuentos como recurso para trabajar las emociones
Una buena herramienta para trabajar las emociones en casa es a través de la lectura de cuentos. Siempre, ante una determinada situación, es posible elegir una historia relacionada con la propia emoción del pequeño. Los niños tienden a identificarse con los personajes de los cuentos y no es difícil encontrar alguno que se adecue al momento y la emoción que queramos trabajar.
También existen algunos libros dedicados especialmente a trabajar diferentes emociones. En casa tenemos unos cuantos, que se adaptan a las diferentes edades de mis hijos y trabajan las diversas y variadas emociones.
Nuestros libros siempre están allí dispuestos a afrontar los posibles acontecimientos que nos depara el devenir cotidiano. O simplemente para cuando nos apetece compartir una lectura amena en familia.
Nos gusta para el más pequeño de la casa la colección de Los atrevidos de Elsa Punset, en la que en cada volumen se trabaja una emoción, gracias a la historia protagonizada por Alexis, Tasi y Rocky. En la colección Taller de emociones podemos encontrar títulos relacionados con la autoestima, el miedo,…
Otro libro que se basa en cuentos cortos, esta vez protagonizados por los animalitos de un bosque es Cuentos para educar a niños felices de la editorial SM. En casa tenemos la versión en catalán, Contes per educar infants feliços, de la editorial Cruïlla.
En este ejemplar encontramos, además de los cuentos que nos servirán de base para trabajar las emociones, una serie de definiciones y consejos para los padres, que son de agradecer. Al igual que las actividades que proponen al final.
Para los más mayorcitos nos gusta recurrir al libro titulado El arte de emocionarte, en el que se trabajan muchas emociones, en concreto 39, y se puede leer solo o acompañado. También propone una serie de actividades muy útiles para realizar un esfuerzo de introspección, cada una a su nivel.
Y remitiéndonos a la teoría de las inteligencias múltiples de Howard Gardner, quiero apuntar que el desarrollo de la inteligencia intrapersonal, y como consecuencia la interpersonal, es uno de los legados más valiosos que les podemos dejar a nuestros pequeños, ya que les permitirá adaptarse mejor al mundo que les rodea.
Un niño que aprende a gestionar correctamente sus emociones se convertirá en un adolescente o adulto más capacitado para solucionar los conflictos o contratiempos, y tomar decisiones responsables que le puedan surgir a lo largo de su existencia.
Que grandisimo post. Me has dado muchas ideas. Por aquí hay dos peques con grandes handicaps en su gestión de emociones. Estamos trabajando en ello 😉
P.D: Yo tampoco las gestiono de lujo :_/
Qué bien!! pues a practicar..Es un trabajo del día a día y siempre es bueno tener recursos 😉
Qué buen post! Me ha gustado mucho. Es un tema que me interesa y me gusta tu enfoque, especialmente lo de trabajar la empatía, que creo que es importantísimo. Tu selección de libros me encanta, aunque para mis hijos, que son más pequeños, no me alcanza todavía. En cambio a ellos les viene muy bien el de “El monstruo de los colores”, que les ayuda mucho. Ah, y casualidad de la vida, en uno de los post de esta semana hablo sobre el bote de la calma jajaja Es que está muy de moda. Me ha encantado el post! Besos
Gracias, me alegro de que te haya gustado. En casa desde siempre vamos haciendo cosas de estas. Incluso cuando hacemos cosas en familia salidas, excursiones.. Tenemos una libreta de experiencias en la que todos escribimos como nos hemos sentido con la actividad!! Sí son para niños un poco más grandes pero ya llegará!! El bote de la calma si que está muy de moda ahora, en nada me paso a leerte!! Besos
Muy buenos tips para trabajar las emociones. Me ha gustado lo del calendario y que ponga el gomet con la cara del sentimiento que ha predominado, porque así, como bien dices, te da pie a entablar una conversación con él o ella.
Me alegra que te gusten..Precisamente el día que publiqué el post pasé por la papeleria y vi gomets con las caritas ya hechas y todo!!
A mi es una de las cosas que más me preocupa de mis hijos. Que no se bloqueen por sus sentimientos que sepan expresar. Que identifiquen y sepan actuar con naturalidad ante ellos. Los libros nos estan ayudando. Pero me apunto los juegos. Un besito
Sí, a mi también es algo que me ha preocupado desde siempre!! Nosotros también tiramos mucho de libros… Apuntate lo de los juegos que va genial!! Besitos
El bote de las emociones lo encuentro un recurso buenísimo. Lo había leído en otro blog y tengo incluso el DIY para hacerlos con mi hijo. Una manera estupenda de reconocerlas. Y el libro Emocionario lo tenemos, incluidas unas fichas para trabajarlas. Me parece un recurso muy educativo que además, están utilizando en el colegio.
Gracias por tus recursos, siempre útiles para las familias.
Sí y además esta muy en auge. El emocionario también es muy buen recurso, que bien que lo usen en el cole!! Gracias a ti por pasarte!!